OIga García Yero
El Patio es uno de los restaurantes más populares de Camagüey. Allí pueden encontrarse platos típicos del viejo Puerto Príncipe como el matajíbaro, el casabe, salchichón camagüeyano, buñuelos criollos, el ajiaco camagüeyano, tan diferente al de otras regiones del país, y así, otras variedades de platos que contribuyeron a marcar las diferencias culturales de esa región en comparación con el resto de la isla.
¿Por qué este interés por la comida?
Es que la cocina forma parte del patrimonio cultural intangible de una nación. Las recetas y modos de cocinar se transmiten de generación en generación. Por eso, la cocina no se mantiene estable, se renueva constantemente.
Quizás todo empezó con el primer conquistador, cuando acabadas sus reservas alimentarias, probó el casabe con carne de un pescado desconocido y, sin saberlo, iniciaba un proceso cultural de transculturación, que ha estado presente en la cocina cubana hasta hoy.
Y no fue solo la cocina española e indígena, sino también la de otros muchos inmigrantes que llegaron a tierras insulares, sin olvidar que la cocina española era diferente en cada una de las regiones de la Península.
Está igualmente el legado de la cocina africana y china, ambas multiculturales. Importa saber, pues, las historias que se esconden detrás de cada plato.
Nada se mueve encima de nuestra mesa sin un pasado…eso es lo más importante…conservar esas recetas, los relatos de familia y las historias, a veces difíciles, que se mueven en el tiempo.
Las recetas, pues, nunca concluyen porque estas son como un gran tejido al cual siempre se le incorporará un punto o un hilo diferente. Es, quizás, la obra más abierta que un hombre tan serio como el teórico italiano Umberto Eco jamás habría entendido, porque el Caribe es otro mundo y Cuba, bueno, qué decir de Cuba. A partir de aquí daremos a conocer estas recetas camagüeyanas. Esos olores, colores y sabores que salían de las cocinas del típico restaurante El Patio.
Restaurante El Patio, Camagüey.
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